Hoy en cuanto me levanté no tenía idea de lo que viviría. En los ascensores se puede uno enterar de cosas inimaginales, las platicas son variadas, desde quien esta viviendo alguna aventura hasta la dieta que sigue tal o cual artista de cine. Ese dìa, mas tarde tomé el ascensor como de costumbre y al saludar noté que junto a nosotros venìa un hombre que no habia visto nunca en el edificio, en ese momento pensé que sería algún visitante, aunque en realidad no me pareció que estuviara ahi para alguna visita, le recorrì con la mirada y vì sus ropas muy sencillas. No se porque no podrìa quitarle la mirada de encima, se me hacìa un tanto familiar, me parecìa un hombre un tanto extraño de mirada muy sombría y de aspecto triste. Yo seguí hasta casi el último piso y el hombre aún estaba en el ascensor, permaneció callado todo el trayecto y sin hacer algún gesto, ; solo estaba parado ahí, al salir del ascensor, no se porque se me ocurrió mirar de re-ojo hacia la puerta del ascensor, y por un momento me pareció ver que no había nadie, pero ¿como podía ser eso? lo había dejado detrás de mí y nadie salido conmigo o por lo menos yo no lo habia notado, asi es que miré hacia el pasillo, hacia un lado y otro... nada.
Me quedé con esa incógnita todo el día, antes de salir del edificio, tuve la grandiosa idea de preguntarle al celador quien era aquel caballero de aspecto sencillo que tenia su oficina en el mismo piso? Entonces, sucediò lo inesperado, el guardia me miró sonriente y me dijo: Lo vio verdad? – Vi a quien?- le preguntè con un nuda hecho en la garganta -al “muertito” me respondiò el celador; todos los días alguien en el edificio alguien lo ve, y hoy le tocó a Ud. – En ese momento sentí que la piel se me erizaba de arriba abajo, y cierto frío recorría mi cuerpo, parecía sacado de una película de terror, yo habìa estado hasta el ultimo en un ascensor sola con un “fantasma”??, pero como dìa ser esto posible?¡. Mientras mi lógica trataba de descifrar eso- solo atinè a preguntar - Y quién se supone que es? o era?- El celador me contò que aquel habìa trabajado en el edificio y que el dueño le permitía ocupar un lugar en el último piso porque no tenía donde quedarse, no tenía familiares ni a nadie más, pero que un buen dìa lo encontraron muerto en su habitación y aparentemente murió mientras dormía, pero la cuestión era que nunca se fue, y que varios lo han visto en el ascensor. –Ud. también? le preguntè entre medio nerviosa e incrèdula, el celador me respondiòn con un "si" a secas.
Me despedì del guardia y salì con la cabeza que me daba vueltas. Mientras me dirigía al auto, me pregunte a mí misma ¿ porque lo habìa visto yo? ¿ y porque justo hoy?.
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