Me encuentro en una etapa de mi vida, en la que la mayor parte de mis noches me encuentro sin sueño y haciendo planes, tengo tantas y tantas ideas, que la noche me parece poca y el dìa tambièn, sobre todo porque durante las primeras horas de la mañana y tarde no puedo concentrarme en mis largas horas de planificaciòn, sino en las tareas que me asisten.
Hasta hace algunos meses atràs todo parecìa ir tan normal, no ocurria nada extraordinario, solo cosas cotidianas, pero de repente todo cambiò, vino el nuevo bebe (la bebe) y nuestro mundo literalemente se puso de cabeza. Lo que parecìa una vida completamente calculada, ya no lo era màs. Y sobre todo extraño dormir sin un ojo abierto y el otro cerrado por la preocupaciòn de que si a la bebe le pasa algo malo, como enredarse en su colchita o aficciarse con el chupòn, pero tiene sus recompensas, ver a nuestra bebe evolucionar es una bendiciòn, tan pequeña, tan fràgil, ahora es una hermosa bebita de un año, y junto con mi otra hija son mis dos grandes tesoros, y una gran responsabilidad. Mis dìas pasan entre repartir mi tiempo (y mis hormonas) para cada una de mis hijas, que si con una soy tolerante con la otra no lo puedo ser tanto, porque hay que poner lìmites, sino se descarrìa, bla, bla, bla. Y eso aunque no me lo crean, no es lo agotador, pero si el de reacomodarnos, primero el espacio fìsico nos quedò pequeño, pensamos que poner a los dos hijas enun mismo dormitorio no serìa un problema, pero si, es una bebe, mi hija adolescente no tiene porque pasar malas noches, yo y su papà si. Entonces decidimos poner su cuna dentro de nuestro cuarto, y asì si es menos aterrador que saltar de la cama en medio segundo y al otro segundo estar con la bebe en brazos, asì es que fue buena idea pasarla a nuestro dormitorio. Pero y ahora : el espacio de juego, cuando comenzò a gatear, fue el acaboce, le compramos unas colchonetas para que gateara sin tener que golpearse, y pasè arrastrando las colchonetas por toda la casa, ya que no solo querìa gatear en el dormitorio, sino que querìa explorar toda la casa, mi casa es en definitiva zona de combate o lo que es lo mismo zona de juegos. La ùnica soluciòn posible es buscar una nueva propiedad, que sea mucho màs grande, porque en definitiva la que tenemos ahora nos resultò demasiado pequeña. Y, en eso estamos, ahora entienden porque me encuntro haciendo tantos planes, encontrar una propiedad no e slo difìcil, sino que reùna todo lo que necesitamos, y sobre todo que sea a prueba de bebes super hiperactivos como Valentina. Cada vez que pienso en la casa nueva, me viene a la mente como tendrà que estar adecuada para ella. En fìn cada dìa descubro algo nuevo, algo que no sabìa sobre protecciòn para bebes, ahora soy una asidua lectora de artìculos para bebes y madres y todas las cosas que tengan que ver con los bebes. Artìculo que sale, que yo lo leo enseguida. Lo ùnico que quiero es poder cambiarme lo màs ràpido posible porque realmente el poco espacio està por volverme loca, literalmente. Por aquì es contarè como me va.
Abrazos.
Comentarios
Publicar un comentario